8/6/07

Palabras para interrumpir un suspiro

Pensaba que escribía y que no dejaría de escribirte, no a ti, sino de escribirte con cada palabra, pronunciada o no. Como la noche recurrente de las penas a la que vuelvo...o que la mañana aterrizaría trasnochada como una golondrina al nido que vacío ha quedado.

Huele a ti el verano. Igual que cuando niño con los pies descalzos esperando en el sillón y las ventanas miopes por el agua. He amando tanto que la lluvia no me dejara ir a la escuela.

Hule a ti como el verano, cuando los caracoles fatigados en el sol y mis ojos de burbujas
con un pescado que dibujaste en mi brazo angustiado de no abrazarte; él sentado allá.

Recuerdas que era verano? Y que esa noche te escribí una carta que decía adiós casi cien veces... he mentido alguna vez tanto...

Huele a ti como en la noche, en la cama nunca bajo las colchas o las cobijas. Nunca, jamás completamente desnudos; ocultándote y ocultándome, desnudos del espíritu.

-Apaga la luz... (La noche se mete por los ojos, somos sólo boca y agua, el verano todavía, tu cuello)

Aprendíamos a vernos con la boca? (fuimos saliva y labios)... a acecinar el abrazo de los hermanos

(Supo a ti la boca y no supo quedarse)...

Guarda este momento Julio, sácalo de ahí. Ves? Aún está intacto. Mira... Sólo se ha ensuciado un poco, sacúdelo, aléjalo, sepáralo del derrumbe. El polvo aún se levanta y nubla la vista, espera a que se disipe, sólo veras las ruinas, las construcciones destruidas por las que caminaras. Apártalo...

Huele a mi, entre lo poco de los besos, a ti como tu pelo. Como quedarme en tu vientre, en tu pecho..

Duele, duele a ti y se guarda... como era el amor cuando la más grande esperanza, a ti como el verano, como la mirada de dos niños aterrados, como el amanecer un día después de la tormenta.

Hago el hacer no hacerte más, como las palabras que se atropellaron a la partida...

Sólo se va... agárrate fuerte amor, al perder este nombre, porque el amor se va sin despedirse, se va lejano y alejándose... humillado y avergonzado, de nosotros, de no haber sabido cuidarlo, quererlo como debía ser querido... el pobre, el niño temeroso y huidizo, endeble como una flor a mitad de la tormenta...

Agárrate amor, no más de mi porque tu nombre ha cambiado y el mío... y tampoco estas aquí para agarrarme..

Duele así el haber estado frente a ese vacío tan claro, igual que la luna sobre los ojos...
Así el haberlo llenado de roturas y de increpar las palabras que proferimos para el otro

Pero al final sabe así, a ti y a mi, sabe a la vida... a pedir que te vallas y demandar que no te marches, que no me marche... a demandar que cese la guerra... porque te quiero, igual que lo hice siempre mientras esperaba que llegaras... esperando que por fin te fueras tú y vieneras tú, a recuperar el abrazo que más allá dibujaría el incesto...

Sabe a ti y a mi... huele a verano.... como tu boca supo y ya no sabe más.