25/4/07

Seré supersticioso

Raro éste asunto, de hoy en adelante seré supersticioso. Parece que funciona eso de quejarse con Don nadie en algún lugar de ninguna parte “... punto muerto equidistante al grito náufrago de una estrella.” Ja, los estridentista, muy poco estridentes. Mañana empiezo a trabajar, les digo que sí funciona. Y qué velocidad! Pero sigo angustiado y, peor, triste. Por qué, porque México apesta, en el buen sentido de la palabra. Apesta con todas las letras y bastante. A veces aún pienso si debía volver a trabajar de mesero, a robar a los ricos, alcohol + rico pendejo = dinero fácil. Pero robar es triste y la alta sociedad es más triste, así que no sería muy diferente. Como sea, mañana voy a trabajar. Trabajo de obrero y, peor aún, sueldo de obrero, el sueño de todo artista plástico, diseñar calendarios para una de tantas empresas explotadoras. Pero bueno, hay que trabajar, el refrigerador ahora está ya casi medio vacío del medio vacío de ayer, nada bueno. Como le decía mi papá a mi hermana -qué crees, que las golondrinas no van a dar de comer? Y lo peor, en Querétaro no hay golondrinas, así que estoy perdido. Adorno decía algo así como que el artista había tomado la última libertad posible, la de morirse de hambre. Eso sí que es malo y triste, pero bueno. A trabajar.
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Salgo del lugar al que regresaré mañana y los próximos días de esta semana y la que sigue y la que sigue, hasta que se vuelva insoportable. Mucho calor, reparan una calle y los camiones marchan lento. Camino, escucho Kruder and Dorfmeister, de nuevo esa sensación de la vida como una película, quizás una de ciencia ficción, todos es ficción y ciencia, sin pistolas de rayos láser ni naves intergalácticas. Espero el camión que me llevará de regreso. Alguien se sube a tocar, se mezcla lo que canta con lo que escucho, no puedo subirle más porque mis oídos se dañan, demasiado sensibles, otro motivo para no regresar de mesero.

“y todo pare qué? Para qué tanto amor...”, canta el tipo con su guitarra.
“I am the scavenger, between the chips of union…” se escucha en mi cabeza.

No logro poner atención a ninguna de las dos cosa, espacialidad, estereofonía, simultaneidad, la vida polifónica. Intentaría describirlo pero no funciona, hago un cagadero, demasiado discursivo el lenguaje de los hombres. Como el tiempo en las pinturas de Picasso, un cagadero, un cagadero no visto, pero un cagadero. La vanguardia apesta, militarismo, casas de vanguardia, teléfonos de vanguardia, ropa de vanguardia, amores de vanguardia, escritura de vanguardia, drogas, sexo de vanguardia; el concepto de vanguardia apesta, como la modernidad, quiero dejar de ser post-moderno y me siento como Gioto, ni renacentista ni nada, quiero más ilustración sin modernismo: “atrévase a pensar por usted mismo, incluso en contra de las mayorías”. Picasso, un feliz cagadero, y sigue siendo arte, el tiempo balbucea en la bidimensionalidad y se colapsa, desaparece. Un feliz cagadero, me limpiaría el trasero con esos lienzos pero son muy inadecuados, inadecuados como interfase para el tiempo, inadecuados para limpiarse, hay otras cosas más útiles, exacto, adivinaron: papel de baño, suavecito y esponjosito.

El tipo extiende su mano: “Hay con lo que gusten coperar”. Me habría encantado darle pero no tengo ni un quito.

Y la buena nueva... “Aprobaron la despenalización del aborto.” Esperemos algo bueno salga de esto, más allá de la politiquería, del panfletarismo, del espotsismo hiperpublicitario. A menos sabemos que el PAN no tiene todo el control, aparentemente. Y en verdad que se hayan analizado todos los pros y los contras, porque no se trata de legalizar un problema para hacerlo de lado, porque el día que la violación se vuelva un problema de salud pública no la vamos a legalizar para que usted tenga una violación digna, con normativas de calidad y de control de higiene.
Educación, todo se resuelve en eso, nadie tendría que despenalizar algo que no sucede. Muy lejos. Porque que la mujer decidiera sobre su cuerpo sería que no hubiera embarazos no deseados. Aún muy lejos. Y no, la mujer de nuevo usada, ahora como estandarte política, más trampas, que joda con la política. Ojalá algo bueno salga de esto; es diferente despenalizar algo a que en verdad se vaya a hacer lo que se dijo......

Alguien me pregunta si voy a ir al concierte de Shakira, me encuentro sorprendido, tal vez hoy parezco más humano. Mañana trabajo, más humano.

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