2/4/09

Sobre lo bueno y lo malo de no tener amigos

[Diálogo 1: Julio y °venganza]

Julio: Lo mejor de no tener amigos es que jamás tendré que ir al velorio de uno.
°venganza: ¿Y lo malo?
Julio: Pues un chingo de cosas… pero me aguanto como los meros cobardes.
°v: Bueno, pero eso del velorio lo dices porque no te gusta asistir a lugares donde se reúnan más de tres personas. Contándome a mí, a lo mucho no te sentirías incómodo con otro más; sólo uno, que fuera del sexo que llamamos femenino, preferentemente.
J: Sabes que no me gusta llamar la atención.
°v: No es que no te guste es que, según yo sé, no sabes. Y como quieres que toda la atención esté sobre ti… el que sólo haya una persona más lo facilita.
J: Tal vez… ¿Pero tú cómo podrías saberlo? ¿Y por qué dices eso del velorio?
°v: Porque así es. No puedes tener miedo a una pérdida… ni siquiera puedes tener empatía sobre las cosas de la muerte. Sería como pedirle a un vaso de leche que se imaginara lo que es estar embarazado o que te explicara de forma coherente cómo se siente besar a alguien que has amado; ni yo podría, de hecho.
J: Te estás perdiendo en el camino, eres un charlatán. De verdad que no sé cómo es que aún hablo contigo.
°v: Simple. No puedes evitarlo… Aunque quizá tienes razón. Lo que quería decir es que eso de lo bueno de no tener amigos aplica en ti a que no tendrías que asistir a alguna reunión con su familia, a algún cumpleaños. No porque te importe, no porque te conmueva; sólo porque no soportas a la gente.
J: Pero no puedes saberlo. Son sólo conjeturas. No puedes pretender mirar más allá de tus propios pensamientos.
°v: Quizá no. Pero lo sé todo de ti. Yo te puse ese nombre del que siempre te quejas, porque sabía que te quejarías…
J: Pero en el fondo no tienes idea. Ve cómo estás temblando. Siempre dudas, a diferencia mía. Todo esto que te imaginas es justamente lo contario. Aquello que crees verdad, sin contar que jamás podrás pasar de ese creer… es justamente lo contrario. No te has dado cuenta que el mundo está invertido…
°v: Tú qué puedes decir… sólo blofeas.
J: Quizá, pero estás entrando en pánico. Lo cierto es que yo sé cosas de ti que ni siquiera tú sabes y que jamás podrás saber. Porque tienes miedo… ¿Te ríes?... ¿Has visto como llorar y reírse son muy parecidos?... Es lo mismo que el sol en el oriente al alba y el sol en occidente al ocaso.
°v: Puedes pensar lo que quieres, puedes pretender lo que quieras, puedes decir, sentir lo que quieres; porque es, y tú lo sabes, lo que yo quiero, aunque yo no lo sepa. Puedes entonces querer seguir con esta farsa, hacerte el interesante; pero yo, sólo yo, puedo hacer que te calles.




J: Ja...

¿Continuará?...

Moraleja 1: “Lo mejor de no tener amigos es que no asistirás al velorio de ninguno de ellos”

9 comentarios:

MinnaSade dijo...

Grandioso estilo.

Minna

Unknown dijo...

que bonito dibujo, me recordó la conversación del espejo...

Tumeromole dijo...

Por eso no es bueno hablar con gente que no tiene amigos. O sea, es mejor no tener NI un amigo... No sé, supongo.

Akisuki dijo...

me gusta la moraleta es buena y cierta. no me gustan los velorios >_<
y esta muy lindo el dibujo ^^

Marilú Repudio dijo...

que buen post...

ahora...
no quieres tener amigos por no sufrir la perdida... o porque simplemente no te gusta perder el tiempo...
en mi caso ahora y siempre eh escojido la segunda.. pero siempre me dejo llevar para terminar convenciendome que sigo siendo una idiota por confiar en alguien que no soy yo misma

Sascha! dijo...

Yo huyo de los velorios. Voy a empezar a considerar dejar de tener amigos para no tener que huir de ningún velorio nunca más.

°venganza dijo...

Gracias por sus comentarios.

Rné, dijo...

uuum, cómo no tienes amigos a los que nunca asistiras a sus velorios, cuando mueras, no tendras quien asista al tuyo :O, o al mio, comosea u_u.

°venganza dijo...

Pero no sería relevante, porque estarías o estaría ocupado en otras cosas o nada. Si fuera(s) creyente pues con el infierno, el cielo, el purgatoria o la reencarnación, estaría(s) demasiado/a ajetreado/a como para preocuparme/te de esas sutilezas. Si fueras creyente, pues nada. Sólo los vivos se ocupan y preocupan de ellas, no los muertos. En todo caso, como tendría(s) ni un amigo, ni siquiera habría alguien que se sintiera mal porque nadie asistió a tu entierro. "Lo mejor de no tener amigos es que nadie sufrirá por tu muerte".